Así parimos en Galicia: estas son las maternidades públicas más valoradas

El respeto a las decisiones de la mujer, siempre que no comprometan su seguridad, es medular, aseguran. «Y en 16 años que llevo trabajando, no he conocido nunca al personal sanitario que tome una decisión que no crea en beneficio de la mujer, el bebé y la familia. La sensibilidad es un valor esencial, que yo palpo de las personas que estamos desde en la gerencia del hospital hasta ginecólogos, matronas, pediatras...», afirma el médico.

EL PIEL CON PIEL, ESENCIAL

En el Teresa Herrera, «todas las unidades han ido poniendo matronas, así que hablamos un mismo idioma. Y eso da un valor a cosas que pueden parecer pequeñas o sutiles, pero no lo son, como el piel con piel en el momento del nacimiento», defiende Cristina Valiño, supervisora del área materno-infantil del Teresa Herrera, donde son un cuerpo de órganos bien comunicados las unidades de parto y puerperio, pediatría y ginecología. «Los profesionales que asistimos un parto, los que compartimos este proceso con la mujer y su hijo debemos vivir el momento como algo único, irrepetible. Para cada mujer lo es, y nosotros también lo vivimos así», percibe la matrona, que ha sido paciente de su hospital: «Mis dos hijas nacieron aquí. Con la pequeña, Aitana, decidí que quería dar a luz sin epidural para vivir lo que han vivido tantas mujeres. Esa experiencia te acerca a las demás, las entiendes mejor», asegura. Desde hace un año, ofrecen todos los días talleres para familias, de cuidados del recién nacido y de lactancia, dos áreas estrella del materno. La asesora de lactancia, Alba Sánchez Ansede, es una figura Premium.

PRÓXIMOS RETOS

Los cambios en la asistencia al embarazo y el parto son parte de un cambio en la visión de la mujer, y de su evolución. «Piensa en un icono como Concha Velasco promocionando compresas para las pérdidas de orina -amplía Cristina disparando al disfraz publicitario que se pone a la salud sexual de la mujer -. Parece que esas pérdidas van con el hecho de ser mujer. Hemos avanzado ya en muchas cosas, pero hay todo un merchandising que debe cambiar. Hay tantos ámbitos en los que mejorar...». Esta es también la actitud, la de evitar que el sufrimiento vaya con el hecho de ser mujer, de la Asociación Galega de Matronas (Agam), un pilar, que ve como una fortaleza de nuestra red de asistencia pública «la formación de sus profesionales», y una debilidad, «las ratios matrona/paciente, a veces hay demasiadas pacientes para una sola matrona». «La recomendación internacional es una matrona-una paciente; si no se cumple, la asistencia no es igual», advierte Isabel Abel, presidenta de la Agam.

Que el piel con piel se retome en las cesáreas programadas y se haga en las urgentes es uno de los objetivos en el materno de A Coruña para este trimestre. Las camas para dar a luz son hill-room, multiposición. Hoy todas las mujeres están en habitaciones individuales, el bebé se baña y se le hacen los cribados en ese cuarto, y las cunas son de colecho. Además, hay una escuela de padres para neonatos.

La matrona es la profesional que acompaña a la mujer en todas sus etapas, «pero hace unos años estaba muy limitada al embarazo. En este crecimiento de las matronas ayudan las mujeres. Las madres te dan más de lo que les das. Las matronas crecemos con las mujeres. Yo he llorado en partos, me han marcado muchas madres. El vínculo que creas es mágico», asegura Cristina.

Entre los guardianes de la maternidad en el Teresa Herrera están pediatras y obstetras. Y la cirugía pediátrica es una de las joyas de la cartera de servicios de este hospital. «Tenemos siempre cuatro pediatras de guardia. Nuestros neonatólogos ya saben si va a nacer un niño con un problema, no hay sorpresas», apunta el jefe de pediatría, Jerónimo Pardo. La cualificación aquí «permite atender cualquier problema en el recién nacido sin que hay necesidad de derivarlo a otro centro. Al niño no lo vemos nunca como un paciente aparte, sino muy vinculado a su madre y a la familia», destaca el pediatra. «La sensibilidad y la humanización llevan guiando la asistencia ya muchos años -afirma-. Los niños están permanentemente con la madre. Fomentamos el piel con piel, la lactancia en bebés prematuros y nuestro banco de leche es el principal suministrador de leche materna para el de Santiago. El banco de leche ha sido un éxito tanto para los bebés nacidos a término que tienen algún problema como para aquellos que son prematuros».

¿En la unidad de neonatos del materno hay cada vez más bebés, se ven nuevas patologías o algunas con mayor frecuencia en los últimos años? «No me gusta hablar de números, pero el hecho de que la maternidad se retrase y el incremento en las técnicas de reproducción asistida, esas dos cosas, conllevan un incremento en la prematuridad. Pero también ha habido cada vez más avances que permiten una mejor labor asistencial de los bebés, con mejora de la supervivencia, disminución de la morbilidad y mejora de la calidadde vida», amplía Pardo.

Estamos en sus manos, madres, hijos, familias. Es importante que cuiden el vínculo que nace cuando se rompen las distancias. Y están por la labor, gracias a la voz cada vez más escuchada de las mujeres, y a una entrega profesional que no entiende el progreso sin el valor humano, que cultiva una flexibilidad que no consiguen las máquinas.

El centro son ellas, las madres, de ellas, de su salud y la de sus vínculos, depende el futuro. Ellos lo saben. El próximo reto en el Teresa Herrera es no trasladar a la mujer que está en proceso de parto. «Que pueda hacer todo el trabajo de parto y pasar el puerperio en la habitación -concluye la ginecóloga Belén López, un mensaje que también subraya Cristina Valiño-. Este es nuestro sueño». Y aseguran que luchan a una por él.

El materno de A Coruña es uno de los paritorios grandes de A Coruña mejor valorados, por los avances en la humanización de los procesos de parto y posparto en los últimos años. Junto a él, entre los mejor considerados por las usuarias están también los comarcales Virxe da Xunqueira y el Hospìtal do Salnés, de acuerdo con los resultados de una consulta planteada a Embarazadas Galicia.

Yolanda García, supervisora en el Hospital do Salnés: «Si pides la epidural se pone, aunque no esté en el plan»

«Cada mujer debería poder elegir el centro donde quiere dar a luz», reivindica Isabel Abel, de la Asociación Galega de Matronas

Quizá porque asume sin complejos su condición de pequeño, y por su vocación de hacer las cosas pasito a paso, mano a mano, es Amigo de los Niños el Hospital do Salnés, pionero en esta consideración de Unicef. Su humanización del parto ha desatado su fama, y un «turismo obstétrico» hacia él.

¿Cuáles son las claves de que se aúpe al top de los centros favoritos para dar a luz? «Somos hospital IHAN (Humanización de la Asistencia al Nacimiento y la Lactancia ) desde el año 2005. Aprendimos la importancia del trabajo en equipo, entre todos los profesionales que colaboramos en la atención de los bebés, sin fijarnos en el cargo de cada uno de nosotros. Nuestro equipo va a una; es muy respetuoso con el parto, con las decisiones de cada mujer», subraya Yolanda García Freijeiro, supervisora de materno-infantil (en la foto junto a Adela, auxiliar, y una de las bañeras para parir en el agua). Las charlas en las que se explica en qué consiste el plan de parto, «muy importante», las alternativas que tienen las madres para tomar una decisión, son parte de su valor. «Es triste que, con la pandemia, muchas madres no hayan tenido preparación para el parto. Pero nos hemos reinventado en Zoom», matiza. No se puede parir online... «No, y hemos tenido que luchar mucho por el acompañamiento», dice Yolanda sobre el modelo de un hospital en sintonía con otros como el Son Llatzer, de Mallorca, o el Santa Caterina, de Gerona.

Sus bañeras para dar a luz en el agua son reclamos. Hoy cuentan con dos grandes, con dos salas UTPR como las que prevé incorporar el Teresa Herrera, «donde las mujeres pueden dar a luz en la postura que ellas quieran». Según los datos que ofrece la supervisora, hasta julio de este año un 63,6% de las embarazadas hicieron uso del agua (ducha o bañera) en algún momento en el Hospital do Salnés, aunque no siempre se acabó tratando de nacimientos en el agua.

O Salnés no atiende partos de riesgo. Es habitual que a la paciente se la mande a casa si tiene horas por delante. Aquí hay dos matronas por turno, «y no es lo mismo asistir a dos mujeres que a diez». ¿Qué hacemos para frenar el turismo obstétrico? «Cambiar la forma de trabajar de los paritorios de Galicia», zanja Yolanda García.

Desde hace unos años, en O Salnés solo pueden alumbrar mujeres de su área sanitaria. «Cada mujer debería poder elegir el centro donde quiere dar a luz», reivindica Isabel Abel, de la Agam.

¿Entendéis siempre a las madres? «Sí, claro... Y que los profesionales tengan empatía contigo ayuda. Las mujeres hoy son activistas, pelean». El sistema mejora gracias a eso, y a la fuerza de grupos como Embarazadas Galicia. Su fundadora, María Porto, pide que no olvidemos al equipo profesional que salvó del cierre el paritorio de Verín. A ellas les pedimos también orientación para valorar nuestras maternidades de acuerdo con su experiencia.

La epidural a bajas dosis es otro «punto fuerte en nuestra atención», subraya Yolanda. «Con aquellas mujeres que desean utilizarla, tratamos de que se use en fase de trabajo de parto y instaurado y con las dosis más bajas que la mujer pueda necesitar. Lo que le permite es tener más movilidad e incluso a veces caminar, muy importante para la mejor evolución del parto». Otro de sus puntos a favor es «restrictivo de episiotomía tanto en partos normales como en instrumentales» y el apoyo a la lactancia materna, que le ha valido la reacreditación como hospital IHAN en diciembre de 2018.

En principio, muchas queremos un parto lo más natural posible, sin anestesia, pero a veces caemos en la idealización. ¿Pasa a menudo que la mujer cambia el plan de parto sobre la marcha? «Pasa... Es difícil decidir previamente cómo vas a parir, pero el plan de parto ayuda, es flexible, no es un documento rígido. Si pides la epidural porque no toleras el dolor, se pone. No se niega a la mujer, aunque no esté en el plan de parto».

Ginecólogo y pediatra intervienen solo si se complica el proceso. Este año se han hecho un 18 % de cesáreas en el Hospital do Salnés (y un 16% fueron partos instrumentales), un referente en la atención respetuosa, que no rompe nunca ese nosotros que son desde el principio la mamá y el bebé.

¿Qué paso podria llevarnos más allá en humanización del parto? Según María Porto, de Embarazas Galicia, las casas de parto, que son un modelo de referencia en países como el Reino Unido y Holanda, y hay ya dos de titularidad pública en España.

María Castiñeiras, asesora de lactancia: «En la pandemia se ha visto la solidaridad de las madres»

«Las madres que más donan son las de bebés prematuros», apunta esta profesional del CHUS (Complejo Hospitalario Universitario de Santiago)

Es un alimento y una medicina, advierten las profesionales de la atención perinatal, sobre el oro blanco que brota de las madres. La leche materna salva vidas. Mejora el desarrollo de los bebés, comienza María Castiñeiras, responsable del banco de leche que funciona en el Hospital de Santiago desde el 2016. Como ella hay pocas (es literal, solo Alba Sánchez Ansede en A Coruña y en la pública apenas se conocen más). Es una de las profesionales y su servicio de los más valorados por Embarazadas Galicia, que ayuda a tomar conciencia de realidades como la violencia obstétrica y del valor de figuras como la de María, así como a flexibilizar los protocolos en beneficio de las decisiones personales de las madres. El Parto es Nuestro es otra asociación importante, formada por usuarios del sistema sanitario, en marcha desde el 2003 para mejorar las condiciones de atención a madres e hijos.

Del Chus las flores en maternidad se las lleva sobre todo el banco de leche. El volumen de donaciones que recibe es similar al que tiene Vigo. «En Santiago, el servicio está integrado en neonatos. Las madres lo conocen, tienen contacto conmigo», cuenta esta matrona que pasa la mitad de la mañana en el banco de leche (dedicada a la pasteurización) y la otra mitad en obstetricia, con un taller de lactancia, que se ha retomado.

¿Cómo funciona este banco que se hace rico con la solidaridad? «Recibimos leche de madres donantes, y lo que hacemos es procesarla, almacenarla y distribuirla. En Santiago recibimos leche de madres de todo el norte de Galicia (Santiago, A Coruña, Lugo, Ferrol). Nos la envían, la pasteurizamos y luego la enviamos a esos hospitales para que puedan usarla», explica.

Su papel es apoyar a cada madre en su lactancia, «para que puedan alimentar ellas mismas a sus bebés». En caso de grandes prematuros o niños con una enfermedad, si las madres no tienen una producción suficiente, el banco les ofrece leche donada. Sus beneficios se ven bien en la evolución de los grandes prematuros (menos casos de infecciones nosocomiales, mejora del desarrollo psicomotor, mayor tolerancia a los alimentos, entre otras cosas).

Sus perceptores son los prematuros de menos de 32 semanas, de menos de un kilo y medio, o que han sufrido una enfermedad. Las donantes pueden ser «todas las madres de nuestra área sanitaria que amamanten a sus bebés y tengan una producción buena de leche», señala María. Para ver tu idoneidad como donante, te hacen una historia clínica, una serología y debes firmar un consentimiento informado. Del materno de A Coruña hay muchas madres que donan. «Y el mayor consumo de la leche se da en Santiago y A Coruña».

«En la pandemia se ha visto la solidaridad de las madres», asegura María Castiñeiras, voz y parte de un equipo.

Este año el banco cuenta ya 26 niños que han recibido leche en Santiago, en A Coruña han sido otros 26, en Ferrol 11 y en Lugo 13. Y son 72 mujeres las que han donado, en lo que va del 2021, al banco de Santiago, lo que se traduce en un volumen de 500 litros.

Más allá de las cifras, está la fuerza de las historias de madres e hijos que son el corazón de este banco. Es otro reportaje. «Las madres que donan, las que más se involucran, son las que tuvieron hijos prematuros, que fueron receptores de leche», revela María. Este banco se hace rico con la solidaridad, que alimentan tantas madres gallegas.

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