De por qué las bases de maquillaje en polvo son la nueva obsesión para un efecto segunda piel

Cuando parecía que ya habíamos probado todas las bases de maquillaje habidas y por haber, irrumpe una categoría, no realmente nueva, pero que sí está ganando muchas adeptas últimamente. La de las bases de maquillaje en polvo. En formato compacto, polvos sueltos o incluso en paletas completas, cada vez son más las marcas que se aventuran a lanzar su propia versión, a lo que las beauty junkies se han -o nos hemos- lanzado con avidez. Ahora bien, es preciso advertir de que, en su mayoría, no son aptas para quienes buscan una alta cobertura, pues su principal característica -por la que muchas las están escogiendo en lugar de las fluidas-, es su acabado natural de efecto segunda piel.

¿Por qué pasarte a las bases en polvo? Si tienes la piel grasa, la respuesta a esta pregunta es más evidente. De hecho, cuando le preguntábamos a la make-up artist M. Ángeles Cabrera sobre la mejor opción para este tipo de rostros durante los meses de calor, confirmaba que esta clase de fondos de maquillaje “suelen ser productos pensados y formulados para pieles grasas, manteniendo la piel más o menos mate”. Una gran ventaja para ese gran porcentaje de personas que siempre está intentando controlar -con éxito regular- los brillos indeseados y el exceso de sebo que se va acumulando durante el día, pero que, tal como indicaba la experta, “pueden ser interesantes para todo tipo de pieles durante el verano”. ¿Y una vez pasada la época estival? Sin duda, las pieles grasas se seguirán beneficiando de ese efecto matificante, mientras que las secas también tienen buenas noticias, pues ya existen fórmulas aptas para toda clase de pieles. Es el caso, por ejemplo, de un lanzamiento bastante reciente, el Perfect Tint Powder de IS Clinical, a medio camino entre una base y un protector solar en polvo, que según explica Aura Serras, directora para España de la firma, “es adecuado para todo tipo de pieles, aunque sí es cierto que, para aquellas personas con pieles grasas, les puede parecer más cómodo este formato, porque no queda nada pegajoso, controla los brillos y da un efecto matificante”.

Interested in becoming a teacher? Attend our free Virtual Open House on Jul 13 to learn more about our Proficiency… https://t.co/aJH8wT7HZe
— CESA #1 Thu Jul 08 17:00:40 +0000 2021

Y, de todos modos, aunque puede parecer que este tipo de bases pueden ser más secas por su formato, lo cierto es que aplicando un buen primer antes, se adaptan muy bien a todas las pieles. Pero esta no es la única ventaja que ofrecen respecto a los fondos de maquillaje líquidos tradicionales. Estas son algunas de sus bondades:

Unifican el tono sin recargar la piel. Sí, la función de unificar y esconder imperfecciones es una de las principales peticiones que le hacemos a una base de maquillaje, pero la ventaja de los formatos en polvo es que lo hacen sin dejar un aspecto recargado, sino que dan una cobertura muy ligera de efecto segunda piel.
Son de efecto no make-up. De la anterior afirmación se desprende esta segunda: dada su ligereza, aportan ese deseado efecto buena cara, pero sin que se note que lleves maquillaje.
Son más fáciles de aplicar. Muchas ya traen su propia esponja aplicadora o una brocha suelta, pero puedes usar cualquier tipo de herramienta que prefieras. La gran ventaja es que se extienden con gran facilidad y es muy complicado acabar con un resultado desigual (o a manchas).
Se pueden aplicar solo en zonas estratégicas. Un truco clásico de los maquilladores es aplicar la base solamente en las áreas del rostro que lo necesiten. Normalmente, suele ser en las aletas de la nariz, el mentón o las mejillas, aunque esto también dependerá de dónde muestre tu piel enrojecimiento o cualquier imperfección. Pero lo bueno de este pequeño secreto es que, de este modo, se logra un resultado mucho más natural y ligero, con el añadido de que la base en polvo se funde con el resto de la piel de una forma mucho más discreta.
Es más fácil hacer retoques. Primero, porque su formato suele permitir llevar la base en el bolso sin problemas (y el aplicador, ya sea brocha o esponja, suele venir incluido en el packaging). Y segundo, porque su acabado natural permite retocar o camuflar brillos en caso de que sea necesario, sin necesidad de tocar el resto del rostro.
Suelen contener protección solar. Aunque no es generalizado, un gran porcentaje de bases en polvo suelen incluir más o menos SPF (y además, de tipo mineral). Eso sí, recuerda que como no vas a utilizar mucha cantidad de maquillaje, lo mejor es aplicar el fotoprotector en crema en casa y emplear estas versiones en polvo para reaplicar este escudo solar durante el día.

Dicho esto, no es de extrañar que más marcas se hayan lanzado a crear sus propias bases en polvo. Es el caso de Fenty Beauty, que estrenó su versión este año; la marca española Cocunat, que presentó hace unos meses una nueva paleta de básicos de rostro en la que se incluye este tipo de fondo de maquillaje; o Kiko Milano, que también incluyó esta clase de base en su colección de verano Dolce Diva. Otras firmas llevan más tiempo con este tipo de producto, como Chanel, que dispone de diferentes tipos de compactos según el acabado que busques; o BareMinerals, que tiene unos famosos polvos sueltos tintados. A continuación, algunas apuestas ganadoras.